La muerte de Denise Pikka , en 2015, es el último suceso grave relacionado con el Camino, con repercusión en los medios nacionales e internacionales. No en vano, la acción de los padres de la peregrina norteamericana de origen hongkonés llegó a hacer que un senador norteamericano y la embajada se interesaran por la resolución del caso. En septiembre fue detenido Miguel Ángel Muñoz Blas, que había cambiado las señales del Camino para que las peregrinas se desviaran y llegaran hasta su guarida.
Hoy día es muy raro un episodio truculento como éste, Guardia Civil y Policía Nacional hacen la tarea de vigilancia, sin embargo se siguen dando engaños, hurtos y robos, por lo que conviene estar prevenido. Son también parte del Camino desde el principio.
No suelen superar el nivel local, cuando son noticia, y así La Voz de Galicia informaba el pasado verano de que la operación "Protegrino" se saldó con la detención de dos personas acusadas de cuatro delitos de robo con fuerza y uno de hurto, sobre once víctimas. "La mujer detenida lo había sido ya en 2018 por 62 delitos, que coinciden en el modo de actuar detectado en 2021. Aprovechaban las horas nocturnas, cuando los peregrinos estaban dormidos, para forzar las puertas de los albergues y llevarse sus pertenencias de valor. Las detenciones son fruto de una intensa investigación, iniciada a raíz de las denuncias presentadas por los peregrinos afectados en diversas hospederías y albergues del Camino Francés y Portugués, en los concellos de Arzúa, Ames y Padrón".
Barbadelo, por donde pasamos en la primera etapa, por ejemplo, era uno de los sitios elegidos por los ‘hosteleros' compostelanos para tender trampas y engañar a los incautos. En El Camino de Santiago, Isidro G. Bango cita un episodio extraído del Códice Calixtino, la primera guía de viaje del Camino Francés y hay quien dice la primera guía turística de la historia. Barbadelo era el campo de operaciones donde los pillos se encontraban con los peregrinos, y sigue:
"Otro -se refiere a ganchos enviados por los posaderos compostelanos- va a Barbadelo o Triacastela a su encuentro peregrinos-, y cuando los avista los saluda y les habla astutamente de otras cosas; luego así les dice: Hermanos míos que vais a Santiago, yo soy un ciudadano rico de esa ciudad, y no he venido hasta aquí para procurarme huéspedes, sino con un hermano mío que habita en esta villa: mas si queréis tener un buen hospedaje en Santiago, hospedaos en mi casa y decidle a mi mujer y a mi familia que os trate bien por amor mío; yo os daré una señal, para que se la mostréis. Así, con falsas palabras, a unos peregrinos les da su navaja, a otros el cinto, a otros la llave, a otros la correa, a otros el anillo, a otros el sombrero, a otros los guantes, como señal, enviándolos a su casa. Cuando éstos llegan a la casa del mismo y se hospedan en ella, después de darle la primera comida la dueña de aquel hospedaje les vende un cirio, que vale cuatro monedas, en ocho o diez"